Dia 4: Amberes y llegada a Amsterdam...

Nos levantamos a las 7,30 ya que nos esperaba un día largo. A las 8 estábamos desayunando y armando la comida para el mediodía.
Llovía, así que salimos del hostel con el paraguas sobre la cabeza y esta vez tomando el camino más corto hasta la estación.
Llegamos, fuimos al super a cargar el celular y nos fuimos a buscar la valija, acomodamos y nos dirigimos al andén a esperar a que salga nuestro tren.
Nos despedíamos de una ciudad encantadora, con muchas fotos en nuestro haber, pero por sobre todo muchos recuerdos en nuestras retinas.
Nos embarcamos en un viaje en el cual teníamos que hacer combinación de tren en la ciudad belga de Amberes.
En el trayecto, decidimos quedarnos a explorar esta ciudad por el lapso de una hora, el cual se extendió a dos una vez que estábamos allí recorriendo.
Fuimos a la plaza central y volvimos a la estación, pasando por todo el centro comercial de esta ciudad famosa por sus diamantes.

Como detallé anteriormente, nos quedamos 2 horas y nos volvimos a subir al tren, ahora con destino a Amsterdam.
Dejábamos atrás el primer país del recorrido. Ciudades Visitadas: 3. Para mí, la más linda: Brujas.
Tren, llenísimo, cabe aclarar que era el día de la reina, por lo tanto eran muchos los que se trasladaban desde todas partes del país a la capital Holandesa para disfrutar de los festejos. Mientras nos movíamos dentro del tren buscando lugares para sentarnos, todo el pasaje iba sufriendo los daños de la valija de Tef, jeje.
Después de 30 minutos logramos sentarnos. Tef se durmió mientras se sucedían las ciudades a nuestro paso. Delft, vista desde el tren, es muy bonita.
Llegamos a la última estación del recorrido, Amsterdam Zuid, debido a los festejos el tren no llegaba hasta Amsterdam Centraal, así que desde la estación del sur, debíamos tomarnos el subte hasta el centro de la ciudad. Luego de esperar alrededor de 1 hora y de amagar con irnos para el otro lado para poder tomarnos el subte tranquilas, nos subimos, apretadas pero bue…
Llegamos al centro y nos dirigimos al hostel cristiano. La recepcionista nos avisa que vamos a tener que dormir en habitaciones separadas, discutimos un poco y logramos que nos cambien de habitación para la segunda noche, así dormíamos en la misma pieza.
Nos bañamos y decidimos salir a recorrer sin un destino programado.
La ciudad era un caos y se vestía de naranja por todos lados.
Caímos en china town donde compramos spring rolls, horribles! Y con gusto a porro. Después de caminar por todos lados llegamos al DAM, la plaza central donde había una feria, tipo kermesse, con juegos y premios.

Enfrente, encontramos un supermercado en donde compramos la comida para cenar y volvimos al hostel.
Como teníamos habitaciones separadas por esa noche, decidimos quedarnos en la sala común del hostel charlando, encontramos unos sillones muy cómodos al lado de la biblioteca de biblias, y empezamos a delirar ahí, si Tef no estaba segura que los spring rolls tenían algo, con la zarta de boludeces que dijimos se tuvo que haber convencido.
Después si, comimos y nos fuimos a acostar cada una a su pieza, que como era al lado y solo teníamos una pared lindera entre su cama y la mía, el bluetooth del celu funcionaba y nos quedamos charlando mediante el mismo.

Dia 3: Bruselas y Brujas

Si bien el despertador estaba puesto para las 08.00, yo amanecí a las 6,45 y me quede haciendo tiempo hasta las 7,55 para despertar a Tef, pensando que me iba a decir, “espera, ya me levanto”, pero no fue así, apenas le dije Tef, ella ya estaba despierta, con las zapatillas puestas y los dientes cepillados jejeje.
Bajamos al salón común a tomar nuestro desayuno, era bastante completo y aprovechamos para armar los sándwiches para el almuerzo en la cercana ciudad de Brujas.
Buscamos nuestras mochilas en la habitación y partimos rumbo a la estación de subte más próxima para dirigirnos hasta Heysel, donde se encuentran el Atomium y el Brupark.
Las dos boludas, se tomaron el subte en la dirección contraria, gracias a d’s era un recorrido circular, por lo tanto llegamos igual al destino deseado.
Una vez que bajamos del subte visualizamos el Atomium, un átomo magnificado 165 billones de veces, que fue, como la torre Eiffel en Paris, producto de una exposición.

Después de realizar la sesión de fotos correspondiente nos fuimos al Brupark, donde se encuentra el Mini Europe, un parque temático donde podemos observar las edificaciones más significativas de Europa, en tamaño reducido, claro está. Habíamos acordado con Tef que si nos cobraban la entrada no ingresábamos. Presentamos la credencial de “Telefe” y nos brindaron las entradas a precio €0!
Si bien está delimitado el recorrido a realizar, tuvimos que desviarnos por urgencias para usar los sanitarios. Una vez terminado el “tramite” continuamos con nuestro recorrido. A lo largo de una hora más o menos pasamos por todos los países de Europa.

Volvimos a la estación de subte y de ahí a Gare du Midi, buscamos las valijas en los lockers y compramos el boleto para ir de Bruselas a Brujas.
Después de 1 hora de viaje, arribamos a Brujas, buscamos los lockers, armamos un bolsito para las dos y nos fuimos en busca de nuestro hostel. Llegamos después de preguntar varias veces y sin respuestas satisfactorias.
El hostel, estaba bueno, salvo que eran 3 pisos por escalera caracol y muy angostas. El recepcionista se hacia el simpático tratando de hablar en español y nos asustaba, sobre todo a Tef que me miraba espantada.
Subimos a nuestra habitación, armamos el itinerario y salimos a conocer esta ciudad tan medieval como pintoresca. La verdad es que tenía muchas expectativas puestas en Brujas por todo lo que me habían hablado y me decían que era hermosa y cierto es que supero mis expectativas.
Por donde mires, te deslumbra. Pasamos por la iglesia de nuestra señora, por la iglesia a la santa sangre y llegamos a la Markt, la plaza central. QUE HERMOSURA! Con sus construcciones una de cada color con hastial, el Belfort (campanario del siglo XIII), todo realmente hermoso. Desde allí, seguimos camino hasta otra plaza llamada Burg, donde se encuentra el ayuntamiento (uno de los más antiguos de Bélgica), puentes y puentes (que le dan el nombre a la ciudad: Brugge = puente), teatro nacional y a volver a la Markt, que todavía era temprano y teníamos tiempo.

Después de comprarnos un celular cada una, enfilamos para el supermercado, así comprábamos la comida y emprendíamos la vuelta al hostel. Como siempre hasta ahora encontramos un Carrefour express, donde adquirimos una bolsa de croquetas de papa, el problema iba a ser cocinarlas, algo que hasta ese momento no lo sabíamos, terminó el kilo de croquetas en la basura (llegamos al hostel y no entendiamos como prender el horno, decidimos hacerlas en la sarten, ahora empezaba la busqueda de un poco de aceite o de manteca para ponerle, pero claro, naaaaadie tenia aceite, asi que, vimos un aerosol que a nuestro entender era Fritolin belga, rociamos algunas y las mandamos a la sarten mientras intentabamos prender el horno. El horno prendio y las cambiamos de la hornalla al horno, despues de 20 minutos la comida estaba lista, pusimos en el plato unicamente las que no habiamos rociado ya que las que si habian sido tocadas por el aerosol tenian un olor horrible, todavia no sabemos si era aerosol para limpiar el horno o fritolin, comimos una cada una y fueron a la basura… SI! UN KILO DE CROQUETAS DE PAPA A LA BASURAAAA!!! ERAN UN AAAAASCOOO!!! Ya quedo clarisimo que croquetas sin aceite, nunca mas!).

Afuera hacia frio y llovía, así que, cada una a su cama, al día siguiente, tocaba un largo viaje a Amsterdam.

Dia 2: De Paris a Bruselas y recorrida...

Después de esperar las valijas por un largo rato, averiguamos como llegar a la terminal de tren del aeropuerto para comenzar a usar nuestro Eurail, en este caso de forma gratuita ya que teníamos bonificado el viaje entre CDG y Gare du Nord, lo cual nos venía genial ya que el Thalys a Bruselas salía desde esa misma estación.

Luego de tomarnos un tren interno del aeropuerto llegamos a la estación, abonamos la reserva del tren a la capital belga y pedimos nuestros boletos para el tramo antes mencionado.

Combinación de tren en Gare du Nord y 2 horas después ya estábamos en otro país.

Bajamos en Gare du Midi, estación central de Bruselas y tal como teníamos pensado, dejamos las valijas en los lockers ya que al día siguiente nos íbamos desde esa misma estación.

Después de buscar varios minutos el puesto de informes, lo encontramos. Pedimos plano e indicaciones para llegar a la Grand Place o Grote Markt.

Siguiendo las instrucciones, llegamos a la tan famosa plaza, donde se pueden observar el Hotel de ville (ayuntamiento), Mansion du rey (que nunca fue residencia real) utilizada como cárcel, Mansion de los duques de Brabante e infinidad de restaurantes y cafés, todos con sus mesitas sobre la vereda.
Desde allí, comenzamos la búsqueda del Manekken pis. En el camino encontramos un locutorio al cual entramos para hablar con nuestras familias y avisar que estábamos vivas, sanas y salvas.
Luego de sacarnos foto con el símbolo de Bruselas nos encaminamos hacia la catedral, la cual rinde culto a Saint Michel, descansamos alrededor de 5 minutos en unas reposeras muy copadas que había en la plaza que se encontraba frente a la iglesia y seguimos camino.

Pasamos por el Palacio Real y por el Palacio de la Unión Europea junto con el parque que se encuentra entre medio de estos dos grandes edificios. Seguimos camino hacia el hostel pasando por la columna del congreso.
Una vez arribamos al hostel, preguntamos por un super para comprar la cena, nos bañamos solo con shampoo (paso a explicar porque, resulta que cuando dejamos las valijas en los lockers nos llevamos las cosas necesarias para ducharnos, Tef dijo, deja que yo llevo shampoo y crema de enjuague asi no llevamos las dos, a lo que accedi, cuando llegamos al hostel y Tef esta por entrar a bañarse me mira cagandose de risa y me dice Shei, traje los dos shampoo, je), comimos y nos fuimos a dormir ya eran las 23hs y todavía no habíamos parado.

Dia 1: De Buenos Aires a Paris, pasando por San Pablo...

El día tan esperado llegó, el avión partía rumbo a San Pablo a las 14hs, por lo que nos encontramos con los Sochel a las 11 en el aeropuerto internacional Ministro Pistarini. Una vez hecho el check in en la aerolínea, declarar la electrónica necesaria y charlar un rato en el mc donalds, atravesamos la puerta hacia el mas allá y comenzamos nuestra odisea.
NUESTRO VIAJE HABIA COMENZADO!
Migraciones para salir del país, alguna que otra vuelta por el free shop y comenzamos a caminar hacia la otra terminal, desde la cual salía nuestro vuelo.
Embarcamos y nos sentamos en nuestros lugares a esperar que salga nuestro avión. Una vez que despegamos, nos dispusimos a disfrutar, algo medio imposible ya que el viejo que estaba sentado atrás mío no paraba de golpearme el asiento y el pendejo que estaba delante de Tef, trataba de reclinar el asiento a 180º, parece que no había entendido que primera era 20 filas mas adelante.
Una vez cruzado el Rio de La Plata y estando ya en territorio uruguayo decido poner una peli en la pantallita que me correspondía, la elegida fue Up In The Air, pero apenas arrancó empezó a fallar, así que apagué y busqué algo de música,  aunque en mi cabeza sonaba “… que voy a hacer con tanto cielo para mi…”. Al rato, ya en cielo brasilero, nos trajeron la comida, para elegir, pasti o frango, obviamente, elegimos pasta: mostacholes matarazzo “la pasta de mama” con una salsa de hongos bastante rica teniendo en cuenta donde nos encontrábamos. Lo mejor, el postre, un arrollado de dulce de leche espectacular, el cual pedimos ración doble para merendar y despedirnos así del dulce de leche por unos cuantos días. Nos retiraron las bandejas y el avión comenzó a descender.

Llegamos al aeropuerto de San Pablo, que asco! Luego de realizar los trámites correspondientes a pasajeros en tránsito empezamos a buscar nuestro vuelo en las pantallas de las próximas salidas, pero no lo localizábamos. Pregunte y nos dijeron que salía desde la terminal 2, la pregunta era: donde esta la terminal 2? Preguntando y preguntando, conseguimos que alguien nos conteste con amabilidad y nos indique el camino correcto. Habremos caminado más o menos 30 minutos hasta que por fin, encontramos nuestra puerta de embarque. Allí tratamos de comunicarnos con el exterior pero no había caso, ni wifi, ni teléfono, ni locutorio, ni nada!
Al horario indicado pasamos el umbral y nos subimos al micro que nos depositaría en la escalera correcta para subirnos a nuestro avión.
Viaje eterno si los hay. Después de 12.20hs llegamos a Francia.
Si bien teníamos un speech armado por si nos preguntaban algo en migraciones, empezaban las dudas y los nervios. Llegamos a la ventanilla, presentamos los pasaportes, los sellaron y listo. Eso fue todo. Oficialmente podíamos pisar suelo Europeo y no quedar varadas como Tom Hanks en “La Terminal”.

La Previa...

“…Todo comenzó oh oh…” el año pasado cuando Iberia sacaba una promoción para viajar a España, los pasajes? una ganga, USD600. En ese momento, al estar cursando el último año de la universidad se me complicaba un poquito, pero prometí que si el año siguiente sacaban la misma oferta no lo dudaría y me embarcaría en un largo viaje.
El 21 de diciembre de 2009 rendí mi última materia de la universidad y ya nada me frenaba a realizar ese tan ansiado viaje, solo debía esperar a que alguna aerolínea me ofrezca un pasaje que se acomode a mi presupuesto.
El tiempo pasaba y mis ganas de irme de viaje crecían a pasos agigantados, quería ponerle imagen a todo lo que había estudiado.
El mes de enero transcurría con días muy calurosos en Buenos Aires, casi no había gente en el negocio y al tener el ipod, me conectaba al msn prácticamente a diario.
Si bien las cosas de la vida hicieron que no me hablara tanto con Tef, nunca perdimos el contacto y nos comunicábamos de vez en cuando, aunque no sea tan a menudo como cuando cursaba en Morón.
Gracias a las redes sociales me entero que Tef estaba en Orlando, charla va, estado de facebook viene, se entera que tengo pensado viajar a Europa tipo abril/mayo y me propone acompañarme en el viaje, con lo cual, el mismo era cada vez más posible, ya que ahora tenía compañía, que era algo de lo que me frenaba a realizarlo. Nos debíamos un viaje con Tef y por ahí esta era la oportunidad para saldar esa deuda.
Mi futura compañera de viaje regresó de sus vacaciones familiares y comenzamos a averiguar los precios de los aéreos. Entrando casi a diario a despegar.com (sin saber que en un futuro iba a ser nuestro lugar de trabajo) nos enterábamos de las ofertas y prácticamente todos los días cambiábamos el destino de nuestro vuelo (pasamos por Frankfurt, Milán y Lisboa) debido a los precios y a los requisitos de migraciones de cada país. Finalmente el destino elegido fue Paris, si bien a ninguna de las dos nos había gustado la capital francesa la vez anterior que viajamos a Europa, era la mejor forma para entrar al viejo continente.
Fecha elegida: 26/04, llama Tef a despegar y me informa que ya tiene reservado su pasaje, cortamos y llamo yo, para qué?? Me dicen que ya no hay más disponibilidad. Resultado? Fecha de viaje 27/04.
El 16 de febrero pagamos los pasajes y recibimos el ticket electrónico en nuestra casilla de correo. Era oficial, el 27 de abril viajábamos a Paris por medio de Tam.
Los preparativos eran cada vez más, desde armar el viaje, averiguar precios, alojamientos, sacar el eurail, asistencia al viajero y todo lo que respecta a realizar un viaje a mas de 15000km de casa.
Comienzo a delinear el itinerario, arrancando y finalizando en Paris. Pasaríamos por Bélgica, Holanda, Alemania, Polonia, Austria, Hungría, Eslovenia, Italia, Francia y España (Tef también iría a Grecia), haciendo un viaje circular.
Después de reservar los hostels de los primeros 4 países, me entero que el pase de tren que teníamos planeado contratar no incluye Polonia, por lo tanto eliminamos este país del recorrido y agregamos algunos días a ciertas ciudades que pensamos serian muy beneficiosos para recorrer un poco más tranquilas y sin tanta corrida.
Hablando con un chico que habia viajado el año anterior, me entero que el Eurailpass tiene un 75% de descuento para agentes de viaje, despues de mover nuestros contactos, terminamos consiguiendo los dos pases con ese magnifico descuento.

Imprimimos las credenciales truchas de prensa y lo que restaba era esperar a que llegue el dia del viaje.

Las cosas del destino hicieron que una semana antes de partir, nuestro viaje dependiera de la naturaleza. Resulta ser, que los volcanes de Islandia no tenían lo que hacer y entraron en erupción, sobre todo uno que estaba dormido hacia siglos, por lo tanto todo el cráter estaba cubierto de glaciares. La erupción hizo que cerraran varios aeropuertos de Europa y se cancelen más de 20000 vuelos. Gente varada en todos lados y nosotras que no sabíamos si viajábamos o no. Manteniendo la calma y averiguando que pasaba si no se abría el aeropuerto CDG, todo fue volviendo a la normalidad y dos días antes de nuestra partida, se confirmó que viajábamos.